Destacando el papel crítico de padres y madres en la educación de los niños, niñas y adolescentes, el Día Mundial de las Madres y los Padres reconoce que la familia tiene la responsabilidad principal en la alimentación y en la protección de los niños.
Para el pleno y armonioso desarrollo de su personalidad, los niños y niñas deben crecer en un ambiente familiar y en una atmósfera de felicidad, amor y comprensión. La familia es un derecho humano.